La Bella Italia, en 7 días.......

La ruta empezó en MILÁN, ciudad conocida como la capital de la moda y del diseño. Parada obligatoria la Piazza del Duomo, donde está el Duomo de Milán, a mi parecer una de las catedrales más bellas que he visto donde en cada esquina hay arte; la planta tiene 5 naves, 1 central de 45 mt de altura y 2 laterales a cada lado. Hay que visitar la Iglesia Sta. Maria delle Gracie donde se puede ver el cuadro de "La última cena" de Leonardo Da Vinci. Caminar por la Galería Vittorio Emanuele para llegar a la plaza donde está el Teatro Alla Scala uno de los teatros más famosos del mundo. Pasar por la Pinacoteca de Brera, contiene una de las más destacadas colecciones de pintura italiana, donde podemos encontrar obras de Rafael, Bramante, Tintoretto, Tizziano entre otros. Para continuar el recorrido ir a la Estación central, una estación que vale la pena recorrerla por su valor arquitectónico; de ahí partimos rumbo a:


VENECIA, es una ciudad única en el mundo por ser construida en 118 islas en el interior de una gran laguna. Hay que visitar la Plaza de San Marcos,una plaza imponente rodeada de monumentos arquitectónicos importantes, como el Palazzo Ducale edificio de fachada gótica, La Torre del reloj, entre otros; La Basílica de San Marcos que tiene un planta en cruz,famosa por albergar la obra de Tiziano. Lo inevitable es el paseo en góndola y cruzar los diferentes puentes como: El Puente de los suspiros, El puente de los descalzos,El puente de la Academia, Puente de la Constitución y el Puente de Rialto siendo este último el puente más antiguo de la ciudad y uno de los 4 que cruza el Gran Canal, así también uno de los más visitados porque a lo largo del mismo hay tiendas. Luedo de un recorrido fugaz, nuevamente a la estación de trenes para llegar primero a la estación de Florencia y de ahí tomar otro tren a:



PISA el viaje duro en total 3 horas, llegamos por la noche y nos hospedamos en "Hotel La Torre" que está cerca a la estación y se puede llegar caminando, esa misma noche decidimos caminar hacia la Torre inclinada a pesar del cansancio y así contemplarla de noche. Al día siguiente nuevamente caminamos por la ciudad, pasear por sus "lungarni" (calles a lo largo del Arno) en donde se puede encontrar multitud de huellas de su pasado histórico, pasando por la Plaza de los Caballeros, corazón intelectual de la ciudad situada en el barrio de Santa María y nuevamente....La Torre inclinada y la hermosa Piazza dei Miracoli, pasar el día ahí es divertido si se disfruta de buena compañia; luego almorzar cerca en alguna trattora y disfrutar de un buen o varios vinos. Otros lugares que se pueden visitar son: Museo dell'Opera del Duomo, Museo nazionale di San Matteo. Pisa, una parada obligatoria, ciudad acogedora e histórica.
Luego volvimos a la estación de trenes para viajar por la noche y llegar a uno de los destinos más esperados:


FLORENCIA, nos enamoramos desde que veíamos las calles camino al hotel, dejamos las cosas y a salir a caminar de noche; no es lo mismo ver la ciudad de día, que encendida con luz artificial.
Nuestro hotel estaba cerca al puente más antiguo de la ciudad: El Ponte Vecchio conocido como el puente de los orfebres y joyeros, cruza el Arno en el punto más estrecho, su estructura esta conformada por 3 arcadas; una característica peculiar es la presencia de pequeñas casas que enmarcan el puente. Este puente fue el único que no fue destruído en la segunda guerra mundial, por lo tanto permitió que mucha gente se pudiera salvar. Al frente está el Puente de Santa Trinita, obra maestra de Ammannati, proyecto que estuvo supervisado por Miguel Angel. Hay que tener en cuenta que la historia de Florencia está relacionada con el río Arno, que divide la ciudad en dos, por lo mismo la importancia de sus puentes. El núcleo del centro histórico está formado por la Cúpula de Brunelleschi , imprescindible subir y se podría considerar como una de las obras más grandes del Renacimiento; la Catedral de Santa Maria del Fiore, con la Torre de Giotto y el Baptisterio, todo en la Plaza del Duomo.
Una de las plazas más bonitas de Italia, es la Plaza de la Señoria,la definiría como un museo al aire libre por la majestuosidad de las esculturas que la conforman, teniendo como fondo el Palacio Viejo. Otro lugar obligatorio es la Galeria de la Academia, donde está la obra más destacada de Miguel Ángel, en concreto el David, entre otras piezas de pintura y escultura importantes. En la Basilica de la Santa Cruz, se encuentra el monumento funebre a Miguel Angel, Galileo Galilei, Dante Aligueri, entre otros; altamente recomendable la audiguía que nos explica cada capilla, entre ellas la Capilla de los Pazzi, realización deñ genio Brunelleschi.
Florencia definitivamente es la cuna del arte y la arquitectura. Los días no fueron suficientes y otra vez enrumbar a la última parada:


ROMA, ciudad donde se puede contemplar el tiempo suspendido en construcciones, es considerada una de las cunas de la civilización occidental. Caminara por las calles es como estar en un museo, los lugares de visita obligatoria son: el Foro Romano, Mercado de Trajano,situada en la Vía del Foro Imperial; El Coliseo Romano, Vittoriano, Plaza del Popolo, El Pateón de Agripa, y por supuesto pasear de noche por La Fontana de Trevi, comprar un helado y arrojar las monedas con la esperanza de que se cumpla la promesa de volver a la ciudad.
Organizar otro día para ir a la ciudad- estado del Vaticano, aquí se encuentra la Santa Sede, lo más impactante es la Plaza que fue proyectada por Gian Lorenzo Bernini entre 1656 y 1657; y la Basílica de San Pedro obras dirigida por Bramante, consistía en un edificio con planta de cruz griega inscrita en un cuadrado y cubierta por cinco cúpulas; Bramante murió en 1514 y sus sucesores Rafael, Fra Gioconda da Verona y Giuliano de Sangallo cambiaron este plan genial. Posteriormente, el Papa Pablo III encomendó la dirección de las obras a Miguel Ángel, que retomó la idea de Bramante de planta en cruz griega.
Luego como visita final la impresionante Capila Sixtina, donde cada elemento arquitectónico esta tatuado por arte puro, un largo recorrido donde ver resulta insuficiente, porque uno empieza a sentir.....y para finalizar el trayecto, lo más esperado la bóveda y el abside de la Capilla Sixtina, con la obra maestra de Miguel Angel: "El Juicio Final".Y finalmente mirando hacía atrás, cada paso por Italia, la Bella Italia queda en nuestra memoria......un lugar donde definitivamente hay que volver......